Las pastelerías de las mejores amigas 4.
Perros y galletas
Texto: Linda Chapman
Ilustración: Kate Hindley
Editorial Edelvives
Perros y galletas
Texto: Linda Chapman
Ilustración: Kate Hindley
Editorial Edelvives
ISBN 9788414010754
9,02€, (+ 8 años)
2018.
Por José R. Cortés Criado.
Otra nueva dulce entrega de este grupo de amigas
súperexcelentes a las que todo le sale bien en la vida. Viven en familias
estupendas, solidarias, acogedoras y felices; en un pueblo donde todo el mundo
echa una mano en asuntos altruistas, y no se vislumbran problemas más allá de
la tristeza de no tener un perro en casa, haber cambiado de residencia o vivir
en una vivienda peor a la que ocupaba con anterioridad por problemas
financieros.
Así, Hannah, – ¡Cuando ella anda cerca, suceden cosas!, por supuesto, buenas- la protagonista y narradora de la historia siempre se trae algo entre manos para ayudar a los demás.
En este volumen ha de acoger a una nueva vecina llegada al pueblo que está triste y no tiene ganas de hacer nuevas amigas y ayuda a una asociación, PATAS, que se ocupa de los perros abandonados.
La nueva amiga, Abi, se acaba de mudar a la localidad, ha dejado su antiguo colegio y su antiguo barrio por otro menos rico tras los problemas económicos del padre de familia, y sobre todo está muy triste por no poder tener un perro en casa, antes lo tenía pero la otra vivienda tenían un gran jardín y espacio más que suficiente para temer animales.
La casa de acogida de perros pasa por problemas económicos, su propietaria no puede hacer frente a tantos gastos y una profesora del colegio de Hannah les propone a las niñas ayudar a salvar ese refugio animal.
Hannah se pone manos a la obra desde el principio dedicando todas sus energías a hacer el bien a esos animales abandonados. Idea un plan de actuación que involucra a su madre y su pastelería, incluidos los dos empleados para elaborar dulces que sirvan para recaudar fondos; ella y sus amigas harán galletas especiales para perros en casa, sus amigos tocarán para amenizar la velada, la amiga de su madre pondrá un tenderete con cremas naturales, otra venderá talismanes y demás, un jubilado se encargará de indicar a la gente dónde está cada cosa, habrá un concurso de animales, una rifa de una tarta especial, una barbacoa que atenderá el marido de su madre, en fin, medio pueblo se involucra en la salvación del centro.
Y, por supuesto, todo es un éxito, hasta hay quien le alquila a la dueña una parcela donde se instalará una guardería de perros y algo más que servirá para que la madre de Abi tenga un trabajo relacionado con su especialidad en veterinaria.
Junto a estas dos amigas tiene especial protagonismo Mía, la mejor amiga de Hannah, muy tímida y mejor pastelera; las otras amigas, Alice, Misha, Lara y los chicos también participan en la trama junto a padres, vecinos, amigos...
La novelita se lee con agilidad pues la protagonista no cesa de inventar nuevas tareas y tiene al lector atento a sus problemas; además aprenderá a glasear galletas, a elaborar tartas y a aprovechar las galletas que no resultan vistosas para elaborar una tarta.
Entre dulces, recetas, lista de tareas y deberes cotidianos la lectura se hace muy cómoda. Los dibujos alegran el texto, muchos de ellos son explicativos, otros son mapas detallados de la fiesta organizada para celebrar el primer aniversario del refugio canino.
Gracias a las imágenes el lector se hace una idea de cómo son los personajes, -que la protagonista siempre relaciona con un pastel, una galleta o un pan-, qué aspecto tienen las galletas o la variedad de tartas posibles que se pueden elaborar según la imaginación de Hannah.
Así, Hannah, – ¡Cuando ella anda cerca, suceden cosas!, por supuesto, buenas- la protagonista y narradora de la historia siempre se trae algo entre manos para ayudar a los demás.
En este volumen ha de acoger a una nueva vecina llegada al pueblo que está triste y no tiene ganas de hacer nuevas amigas y ayuda a una asociación, PATAS, que se ocupa de los perros abandonados.
La nueva amiga, Abi, se acaba de mudar a la localidad, ha dejado su antiguo colegio y su antiguo barrio por otro menos rico tras los problemas económicos del padre de familia, y sobre todo está muy triste por no poder tener un perro en casa, antes lo tenía pero la otra vivienda tenían un gran jardín y espacio más que suficiente para temer animales.
La casa de acogida de perros pasa por problemas económicos, su propietaria no puede hacer frente a tantos gastos y una profesora del colegio de Hannah les propone a las niñas ayudar a salvar ese refugio animal.
Hannah se pone manos a la obra desde el principio dedicando todas sus energías a hacer el bien a esos animales abandonados. Idea un plan de actuación que involucra a su madre y su pastelería, incluidos los dos empleados para elaborar dulces que sirvan para recaudar fondos; ella y sus amigas harán galletas especiales para perros en casa, sus amigos tocarán para amenizar la velada, la amiga de su madre pondrá un tenderete con cremas naturales, otra venderá talismanes y demás, un jubilado se encargará de indicar a la gente dónde está cada cosa, habrá un concurso de animales, una rifa de una tarta especial, una barbacoa que atenderá el marido de su madre, en fin, medio pueblo se involucra en la salvación del centro.
Y, por supuesto, todo es un éxito, hasta hay quien le alquila a la dueña una parcela donde se instalará una guardería de perros y algo más que servirá para que la madre de Abi tenga un trabajo relacionado con su especialidad en veterinaria.
Junto a estas dos amigas tiene especial protagonismo Mía, la mejor amiga de Hannah, muy tímida y mejor pastelera; las otras amigas, Alice, Misha, Lara y los chicos también participan en la trama junto a padres, vecinos, amigos...
La novelita se lee con agilidad pues la protagonista no cesa de inventar nuevas tareas y tiene al lector atento a sus problemas; además aprenderá a glasear galletas, a elaborar tartas y a aprovechar las galletas que no resultan vistosas para elaborar una tarta.
Entre dulces, recetas, lista de tareas y deberes cotidianos la lectura se hace muy cómoda. Los dibujos alegran el texto, muchos de ellos son explicativos, otros son mapas detallados de la fiesta organizada para celebrar el primer aniversario del refugio canino.
Gracias a las imágenes el lector se hace una idea de cómo son los personajes, -que la protagonista siempre relaciona con un pastel, una galleta o un pan-, qué aspecto tienen las galletas o la variedad de tartas posibles que se pueden elaborar según la imaginación de Hannah.
Dulce novela
que se lee con atención y que gustará, sobre todo, a las chicas. Me recuerdan
las series de amigos que viven aventuras tiernas, cotidianas, en ambientes
normales sin sobresalto ni sorpresas como la de Los Cinco, pero en esta ocasión las protagonistas son todas
femeninas, los chicos ocupan un segundo plano.
Si quieres conocer el volumen número dos de esta colección, Una cucharada de secretos, pincha aquí.
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