viernes, 30 de septiembre de 2016

Antología de relatos fantásticos españoles Edición de Marina P. Aranda

Antología de relatos fantásticos españoles

Edición de Marina P. Aranda

Ilustraciones: Chema García


Colección: Clásicos Hispánicos

14 x 20 cm, 336 páginas

(+ 14 años), 2016.






Por José R. Cortés Criado


La editorial Anaya quiere acercar al público juvenil los relatos fantásticos de nuestra literatura de todos los tiempos, para ello Marina P. Aranda ahonda en nuestro acervo cultural y selecciona trece relatos desde el siglo XIV hasta el XXI de grandes autores españoles.

La editora no se ha limitado sólo a recoger cuentos fantásticos interesantes, además en la introducción hace un estudio muy curioso que se ocupa del género cuento y de sus rasgos característicos como la brevedad, la acción el conflicto, los personajes, el espacio y el tiempo.

Un segundo apartado lo dedica a la cronología del cuento, desde sus orígenes como literatura oral, seguido de su evolución entre la Edad Media y la Ilustración, otro apartado se ocupa del tema desde el Romanticismo hasta la actualidad.

En tercer lugar analiza lo fantástico que refleja aquello que pasa por la imaginación, lo sobrenatural y la ciencia, comentando las cuatro formas de realidad que se pueden encontrar en una historia de ficción: lo real, lo extraordinario, lo fantástico y lo maravilloso.

Un cuarto apartado hace saber que lo fantástico depende de lo sobrenatural y que este concepto cambia a lo largo de la historia, por ello se ocupa de la cronología de lo fantástico desde la Antigüedad hasta la sociedad actual.

Los relatos son muy variados tanto por la épocas en la que se concibieron como por la temática tratada, aunque todos tienen en común la fantasía, pasando desde un ser monstruoso como es el endriago, hasta el problema de la pierna ortopédica que no puede parar de caminar, pasando por el pavor del hombre que se enterró así mismo o los movimientos de las palabras de nuestro léxico.

Los relatos escogidos son:

Lo que sucedió a un deán de Santiago con don Illán, el maestro de Toledo. Don Juan Manuel.
El endriago, episodio recogido en Amadís de Gaula. Anónimo.
Vida y sueño se mezclan. Agustín Rojas de Villandrando.
La posada del mal hospedaje. Lope de Vega.
El estudiante Lisardo. Cristóbal Lozano.
La pata de palo. José de Espronceda.
El miserere. Gustavo Adolfo Bécquer.
La conjuración de las palabras. Benito Pérez Galdós.
Cuento futuro. Leopoldo Alas «Clarín».
Rosarito. Ramón del Valle-Inclán.
El que se enterró. Miguel de Unamuno.
El otro hombre. Miguel Delibes.
Los libros vacíos. José María Merino.

Es una selección acertada que hará pasar buenos ratos de lectura, a la par que se valorará el buen hacer de los escritores según su época y conocimientos científicos de su momento histórico.


Por último añadir que al final del libro se recogen unos breves análisis de las obras seleccionadas y un conjunto de actividades que suelen gustar al profesorado y aterrar al alumnado.

miércoles, 28 de septiembre de 2016

Un pequeño milagro de la naturaleza ABEJA de Britta Teckentrup

Un pequeño milagro de la naturaleza ABEJA

Britta Teckentrup



Colección: Álbumes. Cubilete

225 x 275 mm, 32 páginas

(+ 3 años) 2016


Por José R. Cortés Criado.

La originalidad de este álbum reside en sus coloridas imágenes y el troquelado que acompaña a sus páginas, así los pequeños lectores podrán seguir el vuelo de las abejas a través de un entorno lleno de vida y del hexágono troquelado desde la portada.

Las primeras guardas nos presenta un paisaje verde con algunas plantas en la parte baja y una abeja en la hoja izquierda dentro de un hexágono; conforme avanza la lectura aumenta el número de flores hasta llegar a las guardas finales que nos muestran una explosión de flores multicolores donde las mariposas y otros insectos se confunden entre tanto colorido. Es un tapiz impresionante.

La historia comienza con el día, las amapolas se despiertan y aparece una abejita, esta sigue su viaje por el bosque donde otros animales viven como el ciervo, la lechuza, el zorro…

Las otras páginas muestran flores, mariposas, mariquitas, pájaros, patos, ranas y muchísimas abejas que van dejando una estela de polen a su paso por el campo.

La gama de colores y la armoniosa combinación de los mismos hacen una delicia de este álbum, donde las abejas y su labor ecológica son la excusa para disfrutar con tanto color y vida.

Las estampaciones de color que forman la vegetación atrapan al lector, la búsqueda de la abeja o las abejas, entretiene a los pequeños y las celdillas que nos invitan a ver lo que ocurre en otras páginas nos divierten.

Al principio solo hay un hexágono troquelado, después cuatro más pequeños acompañan a este y posteriormente se pueden ver nueve.


Bonito cuento que no dejará indiferente a cualquiera que abra sus páginas independientemente de su edad.


lunes, 26 de septiembre de 2016

El asombro legado de Daniel Kurka o el secreto de Nikola Tesla de Mónica Rodríguez

El asombro legado de Daniel Kurka o el secreto de Nikola Tesla

Texto: Mónica Rodríguez

Colección Gran Angular

344 páginas, rústica

(14 años) 2016.



Por José R. Cortés Criado.


Nikola Tesla, inventor, ingeniero mecánico, ingeniero eléctrico y físico, considerado por algunos como un científico loco por las ideas tan innovadoras que mostraba, hoy reconocido como un impulsor de la robótica, el control remoto, el radar, la balística, la física nuclear…, es un personaje clave en la trama de la novela escrita por Mónica Rodríguez.

La autora recrea la vida de otro serbio, Daniel Kurka, desde que a los doce años llega a New York en barco procedente del puerto marroquí de Casablanca. Es un niño huido de su país a causa de la guerra europea, viaja solo, se dirige a Norteamérica porque allí tiene a una tía que se hará cargo de él; el niño lleva una foto de ella, es su única referencia.

Daniel Kurka conoce a su paisano Nikola Tesla al final de su existencia, este lo confunde con su hermano Daniel fallecido a la edad de doce años y le hace algunas confidencias, revelándole un secreto que todas las potencias en guerra anhelan, pero que Daniel sabe guardar por el bien del mundo, a pesar de jugarse su vida por ello.

Daniel Kurka llega a la ciudad prometida y deambula por sus calles y por los pasillos del hotel donde trabaja su tía y se hospeda el inventor, relata sus vivencias y describe los lugares y las personas con las que convive con suma naturalidad, hasta que la vida empieza a complicársele con la presencia de personas amables y atentas que ocultan otras intenciones; el joven va aprendiendo que las apariencias, a veces, engañan.

Monica Rodríguez crea desde el inicio de la historia una sucesión de hechos y situaciones que ponen a lector sobre aviso de que algo importante ocurrirá en el capítulo siguiente, y así, enganchando el final de un capítulo con el siguiente, hace que el lector avance con rapidez la lectura, ya sea por las confesiones del científico, la presencia de espías nazis, de agentes del FBI o de una bella telefonista.

Daniel Kurka va haciendo amigos desde la primera página y, al mismo tiempo, se crea enemigos por hechos que él no termina de controlar, pero que de alguna manera genera. Esa inquietud se mantiene hasta el final de la novela; y lo que en un momento parece bueno, al siguiente toma matices que hacen pensar lo contrario; en esa sucesión de situaciones tensas, revelaciones verdaderas o mentiras disimuladas, un niño madura y aprende a resolver sus problemas, aún a riesgo de su propia vida.

Junto a esa valentía y forma de actuar del joven hacen acto de presencia el valor de la amistad verdadera y la lucidez para saber qué hacer en momentos complicados y difíciles de evaluar con frialdad.

Mónica Rodríguez hace gala de su buen hacer hilvanado una historia creíble, tanto por la personalidad de sus protagonistas como por la perfecta descripción del entorno donde se desarrolla la trama. 


Esta novela no es más que una larga carta de despedida que un anciano tío le deja a su sobrino de doce años tras fallecer, en ella le narra su vida desde los doce años  cuando llegó a Estados Unidos y le deja un legado que se desvela al final del relato.

Se trata de una buena novela que puede gustar a todo tipo de público, aunque al estar protagonizada por un niño, se enfoca para el publico juvenil. 

sábado, 24 de septiembre de 2016

Cuando fui al oeste de Roberto Aliaga

Cuando fui al oeste

Texto: Roberto Aliaga

Ilustraciones: Miguel Ángel Díez


Colección: ¿Te cuento un 

secreto?

21 x 21 cm, 32 páginas

(+ 5 años) 2016




Por José R. Cortés Criado.


En esta ocasión cuando la mamá llega al dormitorio la pequeña dice estar mal, la madre sospecha que tiene que ver algo con el colegio y con su amiga Sofía.La editorial Anaya ha lanzado una nueva colección con el título: ¿Te cuento un secreto?, escrita por Roberto Aliaga e ilustrada por Miguel Ángel Díez.

Se trata de dos colecciones, una de cuentos y otra de secretos, pues en cada volumen una madre le cuenta a su hija un secreto que le sirve para enfrentarse a los problemas cotidianos de la vida.

Normalmente es una anécdota de la infancia del adulto la que permite conectar el mundo de la madre y de la hija, dos generaciones con problemas similares, que si una mala contestación, un temor infundado…, confirmando que todo cuanto acontece puede tener más de una lectura.

Así que le cuenta que cuando era pequeña iba a un colegio del lejano Oeste, y que cierto día se enteró que Víctor, el más temido de todos los niños, la estaba buscando, atemorizada fue a buscar al sheriff, y como no estaba se puso su sombrero y su estrella, y comenzó a seguir el rastro del malvado niño, y tras comprobar sus desaguisados, se enfrentaron en un duelo a pistola, como esto no solucionó el problema se pusieron a hablar.

Todo fue un malentendido, Víctor la buscaba para invitarla a desayunar juntos; y remata la historia con un consejo, que al día siguiente su hija busque a su amiga Sofía y charlen hasta que encuentren una solución a sus problemas.

Esta bonita historia está muy bien ilustrada con unos personajes llenos de vida y expresividad que derrochan sus formas y colores.

Junto a los personajes principales hacen acto de presencia pequeños elementos como muñecos de peluche, caballitos de madera, piruletas, estrellas…, que dan juego a la recreación de la historia y a inventar algo nuevo.


La letra de estos libros es caligráfica ligada, lo que la hace más atractiva a los neolectores y a los primeros lectores.

Si quieres saber de otro libro ilustrado por Miguel Ángel Díez, pincha aquí

jueves, 22 de septiembre de 2016

Bebés animales en peligro de Donald Grant

Bebés animales en peligro 

Donald Grant


Colección Álbumes Ilustrados

235 x 270 mm, 56 páginas

2010. Año de la biodiversidad.


Por José R. Cortés Criado.
 Bebés animales en peligro es un álbum ilustrado que intenta hacer llegar a los pequeños lectores la necesidad de proteger las distintas especies animales y conservar el medo ambiente. El libro contiene tres historias distintas con el mismo denominador común.
La primera se titula “Lémur Catta. El bosque en llamas”; en ella se narran los problemas de un grupo de animales que deben huir de un incendio, como el pequeño lémur ayuda a otros animales pequeños y éstos, después, lo conducen hasta el lugar donde se encuentra su familia. Al final de la historia aparece en una doble página información de Madagascar, su fauna y flora, así como los problemas medioambientales a que se enfrenta.
La segunda lleva por título “Ballenato. Una aventura en el océano“. Mamá ballena enseña a vivir a su hijo y le cuenta sucesos acaecidos a sus ascendientes cuando la caza de ballenas era corriente; en uno de esos paseos marinos, un petrolero se parte y contamina el océano; madre e hijo se despistan, siendo los delfines los que conducen al pequeño junto a su madre. Después se pueden leer datos sobres las ballenas, su caza, y sobre algunos problemas de contaminación del mar.
La tercera, “Aguilucho. La naturaleza amenazada, muestra las vivencias de un aguilucho desde su nacimiento hasta su emparejamiento, en ese período el ave conoce los peligros de la destrucción del medio natural y de los cazadores. Además nos informamos de la importancia que tuvo el águila de cabeza blanca para los indígenas americanos, de la deforestación, de los vertidos tóxicos y del papel de los cazadores.
Los textos son breves, las ilustraciones son mayoritarias y ayudan a comprender el texto. Los animales dibujados son agradables a la vista, muestran algunas poses humanizadas y sus semblantes transmiten tranquilidad al lector. Otra obra de este autor es Nuestro planeta en peligro.
Estas tres historias ambientadas en la tierra, el mar y el aire, ayudan a los pequeños lectores a tomar conciencia de los peligros del planeta Tierra y da unos consejos a seguir para conservar determinadas especies.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Gulliver Siglo XXI de Jordi Sierra i Fabra


Gulliver Siglo XXI

Texto: Jordi Sierra i Fabra 

Ilustraciones: Frances Rovira 

Barcelona, Edebé, 2009.

Cartoné, 152 págs., 30 x 23 cm.

(+ 6 años) 


Por José R. Cortés Criado.


Jordi Sierra i Fabra recrea Los viajes de Gulliver de Jonathan Swift, libro que fue muy polémico en su época pero que terminó siendo un clásico de la Literatura Infantil.

En esta ocasión se trata de un viajero intergaláctico, como no podía ser de otra manera en el siglo en que vivimos; así que nos encontramos con un joven viajero que explora los confines de las galaxias y que quiere dejar constancia de sus extrañas aventuras antes de hibernarse para regresar a la Tierra.

Al comienzo del cuento, el protagonista se presenta como astronauta perteneciente al Cuerpo de Exploradores Espaciales de la Comunidad Europea, y relata que fue absorbido por un agujero negro que lo condujo hasta un lugar remoto del universo que por sus características llamó Tierra 2.

La primera parte de Gulliver siglo XXI
 relata su llegada Liliput y Landraput, país de seres diminutos; en la segunda llega a Brobulcel, país de los gigantes; en la tercera, a Lendrinag, la isla flotante; y por último a Galhanton, el paraíso celestial. En cada uno de estos lugares vive las mismas aventuras que su homónimo del siglo XVIII.

El jovencito Gulliver se desplaza gracias a su nave espacial y a su deslizador; se comunica con los seres vivos que encuentra porque posee un traductor galáctico y sobrevive a todas sus peripecias ya que siempre tuvo la suerte de su lado.

Es un buen cuento, escrito ágilmente por Sierra i Fabra, que dará a conocer las peripecias de Gulliver desde una versión actual, sin desvirtuar la novela original, se trata de acercar la obra a los jovencitos, si desconocen la original, o de hacerles ver otra versión que puede ser comparada con la conocida.

En esta misma línea se pueden encontrar en la editorial Edebé Las mil y una noche (…o casi) y La fabulosa leyenda del rey Arturo, ambas escritas por Jordi Sierra i Fabra e ilustradas por Francesc Rovira.

sábado, 17 de septiembre de 2016

El libro de los 101 cuentos

El libro de los 101 cuentos

Selecionador: Christian Strich

Ilustradora: Tatiana Hauptmann


215 x 280 mm, 

608 páginas

(+ 8 años) 

2016




Por José R. Cortés Criado.


Entre los cuentos de autor los hay de Andersen, Hermanos Grimm, Fernán Caballero, Perrault, Afánasiev, Jacobs, Hebel, Straparola o Almodóvar.

Christian Strich ha indagado en el mundo de los cuentos europeos y de entre ellos ha seleccionado ciento uno para deleite de los lectores. Según el seleccionador, son los más poéticos, emocionantes y divertidos de los miles que leyó.

Algunos de los cuentos seleccionados han sido traducidos de nuevo, otros, revisados,  pero apenas han sufrido modificación alguna; por ejemplo, los cuentos de los hermanos Grimm han conservado hasta la puntuación original.

La selección no sigue un modelo ni un orden establecido, mezcló los cuentos como lo consideró oportuno; así se puede leer un cuento culto y después otro popular, varios populares o una serie de cuentos de autor; unos de animales y otros de seres humanos como protagonistas…

Los populares los hay de múltiples orígenes: irlandés, inglés, serbocroata, ruso, búlgaro, belga, italiano, español, y francés.

Sin duda, una colección para leer parsimoniosamente una y otra vez, a ser posible, en voz alta para un auditorio predispuesto a la fantasía y dejar volar la imaginación, tanto si son adultos como niños, pues la magia de la palabra atrapa a todo oyente disponible.
Buen libro de gran tamaño que puede ocuparnos las tardes de estío cobijados bajo una buena sombra o las de frío invierno al calor del hogar.


El texto se acompaña de buenas ilustraciones a lápiz de gran calidad, muchas en blanco y negro; algunas, de gran belleza, con bello colorido. La ilustradora dedicó cinco años a la realización de estos dibujos.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Cartas de amor a los muertos de Ava Dellaira

Cartas de amor a los muertos

Autora: Ava Dellaira


Colección Literatura Mágica

350 páginas

(+ 14 años) 

2015.






Por José R. Cortés Criado.


La protagonista de esta historia es una adolescente que ha de escribir una carta a alguien que haya muerto por recomendación de su profesora de Lengua.

La protagonista es una niña “rara”, nueva en el centro, poco comunicativa, reservada, que guarda un secreto que la come por dentro.

Su hermana mayor murió de forma trágica y no ha superado el trauma, tampoco su familia que se rompe; ella pasa una semana con su padre y otra con una hermana de su madre; la madre se marchó a vivir a la otra punta del país.

A Laurel se le ocurre escribirle la carta a Kurt Cobain porque su hermana lo adoraba, pero no entrega la carta a la profesora, días más tarde escribe a Judy Garland, Elizabeth Bishop, Amelia Earhart, River Phoenix, Janis Joplin, Jim Morrison, Amy Winehouse, Heth Ledger, Allan Lane, E. E. Cummings y John Keats.

Cada carta es un desahogo para la protagonista, si bien no va mostrando su verdadera identidad y la raíz del problema hasta bien avanzado el volumen, pero atrapa al lector por su verosimilitud y su ritmo.

Su lectura no dejará indiferente a los lectores porque verá el proceso de madurez de la protagonista, sus titubeos ante la vida, sus nuevos amigos, las relaciones interpersonales en el instituto y fuera de él y, sobre todo, la valentía de enfrentarse al problema que la tiene impávida ante la vida.

Las cartas son una llamada de socorro a los muertos, todos ellos amados por la protagonista y su hermana, relacionando vivencias de estas con las de los cantantes, aviadora o músicos que le ayudarán a sobreponerse a la pérdida de su hermana y aprender a vivir su vida una vez que se acepta tal como es.


Muy buena novela, que no es una elegía sino un canto a la vida. Es de lo mejor que he leído este año.

lunes, 12 de septiembre de 2016

El Club de la Mariposa de Jacqueline Wilson

El Club de la Mariposa

Texto: Jacqueline Wilson

Traducción: Ana Doblado


Colección Las tres edades

150 x 230 mm, 280 páginas

2016.






Por José R. Cortés Criado.

Tina es la más pequeña de las tres trillizas, es la más débil y la más protegida por sus hermanas, padres y abuelos. Es más esmirriada y se siente acobardada, siempre busca el apoyo y la ayuda de sus hermanas, pero este curso cuando pasan a la clase de los mayores, la nueva maestra, la señorita Lovejoy, no atiende las peticiones de madre y hermanas, por primera vez van a estar separadas.

Tina está aterrorizada, sobre todo cuando se sienta junto a una niña mucho más voluminosa que ella y más maleducada, en su mesa también está un niño sabelotodo, otra niña rebelde, pero la pequeña Tina teme a Selma.

Los primeros días son horribles, Selma le pega, la atemoriza y las tres hermanas sufren pero no pueden hacer nada ante la inflexibilidad de la profesora.

Los días pasan, Tina se va adaptando, pero tiene problema con la ortografía, con las matemáticas… pero destaca en el dibujo.

Llega a crear un álbum de mariposas dibujadas por ella en el que incluye el nombre del insecto y algunas de sus características; animada por la profesora y con la ayuda de Selma crean un jardín para mariposas en el patio del colegio.

A lo largo de las páginas vemos la evolución en el trato de ambas niñas, como dejan de ser enemigas, son amigas, se vuelve a romper la amistad y es recuperada de nuevo.

También la escritora nos acerca a las vivencias familiares de ambas chicas en sus hogares y en el cole. Una vida agradable en familia se refleja en amabilidad en el colegio y con los amigos y viceversa.

Lo mejor de lectura es que ambas niñas superan sus problemas relacionales y la débil Tina madura, se hace fuerte y es capaz de superar pruebas que nunca pensó que lo conseguiría, tomando confianza y seguridad en ella misma, a pesar de su débil salud.

Bonito libro ilustrado que trata de la superación y el esfuerzo para alcanzar los objetivos que nos propongamos en la vida.



sábado, 10 de septiembre de 2016

"El árbol de la escuela" de Antonio Sandoval

El árbol de la escuela

Texto: Antonio Sandoval

Ilustraciones: Emilio Urberuaga

Editorial Kalandraka

Colección: Libros para soñar

22 x 22 cm, 40 páginas

(+6 años) 2016.

Por José R. Cortés Criado


Es un libro bello, tierno, emotivo, ecológico, solidario, lírico que nos anima a hacer el bien y a intentar mejorar nuestro entorno.

La trama es bien sencilla: en un colegio hay un pequeño y esmirriado árbol que pasa desapercibido para todos salvo para el pequeño Pedro, que temía tropezar con él.

Un día se acercó al arbolito y acarició su tronco, inesperadamente le creció una hoja nueva, pero la profe le dijo que no debía tocar el árbol; sin embargo cada vez que la planta recibía una muestra de cariño sufría un brote nuevo, así hasta que fue un gran árbol que maravillaba a cuantos lo veían.

El fenómeno del árbol atrajo la curiosidad de especialistas en botánica y hasta la profesora cambió de idea y trasladó la biblioteca a la caseta que los niños habían construido entre sus ramas.

Y otro día le surgió en una rama una especie de pequeña pelota que resultó ser una semilla, por acuerdo común se envió a otro colegio que tenía ningún árbol, fue plantada y cuando nació el nuevo árbol estaba debilucho pero una caricia lo animó a seguir creciendo y otra y otra…

Con este final redondo nos deja el autor, Antonio Sandoval,  la puerta abierta a seguir poblando los colegios de árboles que cuando son tratados con cariño crecen frondosos, embellecen su entorno y hacen felices a las personas.

Emilio Urberuaga aprovecha estos pocos mimbres para recrear un plano similar donde se ve el muro del colegio, la puerta y el árbol, pero dotando cada doble página de color y vida distintas.

A los elementos naturales y a los escolares el ilustrador añade elementos ajenos que enriquecen las escenas, donde termina primando la belleza y el colorido del majestuoso árbol.

Buena mezcla de texto e ilustraciones para un público tanto infantil como adulto.

Su autor ha dicho: “El árbol de la escuela de este libro es el emblema de cómo un proyecto educativo novedoso e integrador, cuando se mima de verdad, crece y crece y acaba por llegar a otras escuelas”.

Si quieres leer otros libros ilustrados por Emilio Urberuaga pincha aquí. 



jueves, 8 de septiembre de 2016

Anatomía de un "incidente aislado" de Jordi Sierra i Fabra

Anatomía de un "incidente aislado".

Autor: Jordi Sierra i Fabra


Colección Juvenil Paralelo Cero

184 páginas, 14 x 21 cm.

(+ 12 años).

2010







Por José R. Cortés Criado.


Un joven cambia de novia, de amigos y de vida; ahora se reúne con skins y como no quiere ser un “cagao” coge la pistola reglamentaria de su padre y sale a la calle con su pandilla a demostrar su valía.

Cuando despierta, está solo en medio de la noche, en un parque, y lo único que recuerda es un fogonazo, la cara asustada de un joven negro que está tirado en medio de la calle. No recuerda nada de lo que pasó, no sabe cómo llegó ese cuerpo a la calle, ni dónde están sus amigos, poco a poco los recuerdos vuelven y el miedo y la incertidumbre.

El joven asesinado llamó a su amiga, con la que acababa de iniciar una relación estrecha esa noche, le dejó un mensaje desesperado en el contestador. Ella se teme lo peor y sale en su búsqueda, pide ayuda a su pandilla y comienzan una noche de angustia y desesperación hasta que lo localizan.

Conforme avanza la historia se va conociendo la identidad del chico negro, un antiguo niño soldado que vive con su hermano en Barcelona rehaciendo su vida, que trabaja y tiene amigos españoles

Las indagaciones del policía encargado del caso, de la pandilla de jóvenes, la del hermano del fallecido, la del padre del principal sospechoso y de su antigua novia, nos llevan a velocidad de vértigo hasta el desenlace, que como ocurre en casi todas las obras de Sierra i Fabra, es totalmente inesperado.

Los lectores disfrutarán con este relato lleno de intriga donde todos son sospechosos y reflexionarán sobre la violencia, -conociendo la realidad de los niños soldados en África-; la de los jóvenes occidentales que se basan en cuatro ideas sin fundamento para considerarse superiores a otras personas; la relaciones paterno-filiales y en la amistad, como valor incuestionable en toda sociedad.


lunes, 5 de septiembre de 2016

"El misterio de la lluvia de meteoritos" de Roberto Santiago

El misterio de la lluvia de meteoritos.

Texto: Roberto Santiago

Ilustraciones: Enrique Lorenzo

Editorial SM

Colección: Los Futbolísimos.

312 páginas, rústica.

(+ 8 años) 2016.






Por José R. Cortés Criado.

El equipo de fútbol 7 del colegio Soto Alto está en París, han ido a pasar unos días de descanso en Disneyland con su entrenadora y tres madres en representación de las familias. La madre de Helena, la de Anita y la de Paquete.

El primer día hacía mucho calor y se dedicaron a visitar las atracciones que gustaban a las mayores; ellas estaban más ilusionadas que los niños y estos no pudieron elegir dónde ir, las madres llevaban la voz cantante y se lo pasaron pipa, por el contrario, los futbolísimos andaban un poco desesperados.

Estaban los pequeños desesperándose cuando se encontraron con un jugador francés de su categoría, el mejor del mundo, miembro de la selección francesa de fútbol 7, Luccien, que estaba allí porque iba a celebrarse un encuentro entre las selecciones de Francia y Brasil para inaugurar una nueva atracción; la Lluvia de Meteoritos.

Luccien enseguida pegó la hebra con Helena, eso no le gustó a nuestro narrador, Pakete, ni al chulito de Toni, pero Helena estaba encantada con su amigo francés.
Por esos días hubo una erupción volcánica que afectó a las comunicaciones aéreas europeas y los jugadores brasileños no pusieron llegar  a la capital francesa. Esto era una catástrofe, que se arregló proponiendo a los de Soto Alto que jugasen en lugar de los brasileños.

A la situación de nervios y pavor se unió la desesperación de la entrenadora española, porque el entrenador francés era un antiguo novio suyo y no paraba de lanzar frases irónicas contra ella y su equipo.

Además desapareció la copa de oro que se debía entregar al equipo vencedor, era una maldición, la copa de Jules Rimet no estaba en su vitrina.

Los chicos deciden investigar, resulta que Camuñas y Tomeo la hicieron desaparecer para seguir el juego de la maldición, alguien se la quitó a ellos y ahora nadie sabe dónde está.

Al final se celebró el partido con un resultado muy reñido, el que quiera saber el resultado que lea el libro, y apareció la copa donde menos se esperaba, y las mamás y la entrenadora cantaron disfrazadas de chicas de los años ochenta, se presentaron con el nombre del grupo que formaron en su juventud: “Las Queen de Fuencarral”.

Buena historia, llena de intriga, desasosiego y final feliz para todos.

El texto de Roberto Santiago está acompañado de ilustraciones de Enrique Lorenzo, algunos fragmentos son propios de la novela gráfica.


Buena obra que no defraudará a los seguidores de los futbolísimos y será capaz de crear nuevos fans.


viernes, 2 de septiembre de 2016

La lectura, un arma cargada de futuro de José R. Cortés Criado




Hay artículos que no pierden interés a pesar del paso del tiempo.








Sin recetas mágicas, con un sentido común encomiable, el autor sigue todo un proceso para tratar de contagiar a sus alumnos el gusto por la lectura y por la literatura, para que las incorporen a su menú de ocio de manera permanente y duradera. Desde los juegos creativos a la narración de cuentos, pasando por la lectura en voz alta o la selección de las lecturas, todo tiene su lugar en este proceso, en el que lo más importante es tener claro el porqué y el para qué animamos a leer. (CLIJ)



LA LECTURA, UN ARMA CARGADA DE FUTURO

        
         Cuando hablamos de animar a leer, cada uno puede tener una idea diferente de lo que nos proponemos y de lo que queremos conseguir, de hecho hay compañeros que enlazan animación y lectura con cualquier preposición, y todas valen, es decir, todas tienen sentido, (animación con, de, ante, sobre, tras,... la lectura),  luego no existe un solo camino para fomentar la lectura, por lo tanto el primer paso será clarificar los términos.

         Entiendo la animación a la lectura como fomento de la lectura, es decir, como una actividad dirigida a conseguir que mis alumnos amen la lectura como yo y que ésta sea una actividad permanente en su vida, junto al juego, al deporte o a cualquier otra forma de diversión; para conseguirlo, procuro realizar una serie de actividades alrededor de los libros que hagan placentera su lectura y nos posibilite pasar un buen rato recordando lo leído o ideando cualquier treta para incitar a leer a los menos deseosos.

         Esto no quiere decir que todos mis alumnos terminen el curso devorando libros y pidiendo leer más y más; de esto debemos olvidarnos, no vamos a conseguir que el cien por cien de una clase sea lectora y disfrute de ello. Podremos conseguir que la lectura enraíce en bastantes alumnos, pero no debemos ser ilusos y pensar que en clase vamos a hacer milagros, no, no es posible. Tenemos que tener claro que competimos con las influencias familiares y sociales que no son pocas.
        
Enseñar a leer

La experiencia más gratificante me la dio el libro Las palabras mágicas (1995), de Alfredo Gómez Cerdá, conseguí que veintitrés alumnos de los veinticuatro que componían la clase de quinto curso de Enseñanza Primaria, y que en catorce familias, el libro fuese leído por al menos uno de los progenitores. Todavía recuerdo a una alumna, Esther, que le leyó a su padre el libro en voz alta porque éste tiene problemas de visión. Pero fue lo que se dice una raya en el agua, surgida de la magia y la colaboración de varios compañeros en las estrategias llevadas a cabo antes y durante la lectura del libro.

         En esta “aldea global” de la comunicación, donde los llamados multimedias nos invaden y nos ofrecen un mundo de vivencias hasta hace poco inimaginables, es “trabajosillo” conseguir que nuestros chavales y nuestras chavalas se sienten en silencio ante unas páginas en blanco llenas de garabatos negros, que sus mentes deben descifrar para así imaginar lugares, personas,..., y comprender el desarrollo de las acciones allí ocultas, cuando enchufar un vídeo o un CD ROM es más cómodo, ya que sólo necesitan pulsar unos botoncitos y toda la “magia” que contienen aparece ante nuestros ojos.
        
         Es difícil leer cuando la sociedad en la que nos ha tocado vivir ofrece otras alternativas recreativas tecnológicamente muy elaboradas, que están muy potenciadas y son aclamadas como distintivo de progreso, modernidad y juventud; me refiero a la informática en su versión más lúdica, ya sea por medio de vídeo consolas o de ordenadores personales, que además tiene sus clubes de fans, sus revistas especializadas, y sobre todo posee el poder de hacerte un héroe cibernético; todo ello unido a que los mayores, por automarginación, desconocemos ese mundo, lo que hace que los jóvenes se sientan protagonistas virtuales de sus aficiones y a salvo del control adulto.
--
         Con lo dicho anteriormente, no quiero iniciar una batalla en la que el libro se convierta en el “Capitán Trueno” ante la “maldad ” de la imagen y el sonido, porque las batallas no las ganas nadie, ni tan siquiera el vencedor de la contienda; sino que debemos aprender a convivir con los avances tecnológicos y educar en la lectura de la letra impresa, de las imágenes y de los soportes informáticos; no olvidemos que no todos los CD ROM son juegos “mata-mata”, aunque estos sean los más vendidos.

         También hay otro factor que no debemos olvidar, nacemos con el instinto de supervivencia, respiramos,..., pero no hablamos al nacer. Hablar es un proceso arduo, complicado, largo, y cuando se trata de escribir o descifrar lo escrito, puede llegar a ser hasta aborrecible para algunos, porque de lo que se trata es de la transmisión por parte de los miembros adultos de una comunidad a sus vástagos de un código de comunicación creado por dicha comunidad.

         La palabra no es innata, pero sí es inherente al ser humano, es decir, necesita del hombre y de la mujer para desarrollarse, necesitamos de la palabra para comunicarnos, para aprender, para transmitir lo que pensamos, .., en resumen, necesitamos la palabra para ser personas.

         Una persona que lee, es una persona que conoce la palabra, la domina y con ella comunica sus sentimientos, sus deseos, sus pensamientos,..., ordena sus ideas y gracias a ello mantiene su mente en orden, que no es poco.

         Retomando el tema de la animación  a la lectura en el aula, recuerdo lo que dice Bruno Bettelheim y Karen Zelan, en Aprender a leer, (1989, pág. 15): "Con independencia del bagaje familiar que el niño lleve a la escuela, una vez en clase el factor más importante para aprender a leer es el modo en que el maestro le presente la lectura y la literatura (su valor y su significado)".

         Teniendo en cuenta esta afirmación, deberemos prepararnos para obtener el mayor éxito posible en nuestra labor educadora.
        
Animación a la lectura ¿para qué?

         Cuando tengamos claro lo que queremos hacer, es decir, lo que entendemos por animación a la lectura,  debemos marcarnos los objetivos a alcanzar, para ello lo mejor es plantearse para qué queremos animar a leer.
                  
          Leer debe servirnos para aprender.

Primero aprender a ser libres, gracias a la lectura podemos acceder a la cultura y ésta nos hace libres, nos humaniza. Un pueblo culto no es fácilmente manipulable.
        

Leer debe servirnos para disfrutar, imaginar, crear, soñar, idear, viajar, etc., a través de la letra impresa.     

Leer debe servirnos para no permanecer ciegos ante tantas palabras escritas, ni sordos ante tantas voces que nos hablan desde los libros.

Por último, destacar que hoy en día todo el saber está escrito y que por tanto para aprender, para acceder a la información, debemos saber leer.
        
¿Cómo podemos hacer lectores?

         Ya decía Montserrat Sarto en 1984 que para animar a leer no eran suficiente las actividades de comprensión, dramatización, etc., sino que debíamos llevar a cabo una serie de estrategias que hiciesen al niño lector, pasando de la lectura pasiva  a la lectura activa y descubriendo la gran variedad de libros existentes.

         Los caminos para acceder a la lectura son múltiples y variados. No todas las estrategias, ni todos los libros van a producir los mismos efectos sobre los lectores; ni existe un solo medio de conseguirlo, como tampoco existe una verdad exclusiva, ni una sola cara del espejo.

Lo que sí parece cierto es que unas estrategias elaboradas para conseguir que el alumn@ ejercite la memoria, busque soluciones y sepa definir los problemas, va a facilitar el proceso lector. Si a ellas añadimos un aire festivo, diferenciado del ritmo del trabajo escolar, la animación a la lectura puede ser un éxito. Un aire festivo no quiere decir que debemos montar un circo con payasos incluidos.
        
         La palabra como generadora de historias.
        
El dicho "una imagen vale más que mil palabras", con el que no estoy plenamente de acuerdo, puede leerse también a la inversa. Una palabra nos puede traer mil imágenes.

Cuando oímos una palabra, nuestra mente se pone en funcionamiento, y comienza a rescatar imágenes asociadas a esa palabra generadora; pero no sólo aflora esa imagen, porque una palabra nos trae otra y otra y otra más, hasta el infinito; como esos pañuelos que extraen los magos de su chistera, unos atados a otros, dando la sensación de que nunca van a terminar de salir.

Dice Gianni Rodari en su "Gramática de la fantasía", que una piedra cuando cae en un estanque, primero altera la superficie del agua, moviendo todo lo que flota en ella, conforme avanza en su descenso, mueve la masa de agua y todos los elementos que en ella se encuentran, golpeando finalmente el fondo y desperdigando cuanto restos se encuentren en su poso. 
        
Éste fenómeno es similar al que se produce en nuestras mentes al recibir una palabra; se producen una serie de reacciones en cadena, superficiales y profundas, donde se mezclan conocimientos anteriores con recuerdos, sueños, fantasía, de tal modo, que nuestra mente se activa seleccionando información, añadiendo, quitando, ligando, construyendo, un mensaje nuevo, o una historia a partir de esa palabra generadora.

         Como estrategia creativa, podíamos utilizar también las posibilidades que nos ofrece el binomio fantástico, buscando dos palabras muy diferentes, muy extrañas entre sí, por ejemplo  perro y electricidad; para que nuestra mente fantasee, trabaje, busque la unión de esos dos elementos para poder crear una historia.
        
También podríamos jugar con el diccionario a buscar palabras desconocidas e inventarles un significado, para después crear una historia con ellas;  jugar a comernos letras para así formar palabras nuevas, aprovecharnos de los errores cometidos al escribir para crear otros vocablos, etc.

         La literatura oral.
        
Todos estos juegos creativos efectuados con las palabras, nos acercan a la literatura oral, y nos hace recordar, que al principio fue la palabra.

La literatura se transmitió oralmente hasta hace muy poco tiempo, y aún, en algunos lugares, persiste esta tradición.
        
Aunque la imprenta fue inventada por Gutenberg en el siglo XV, hasta hace menos de cien años no se impuso la moda de adquirir y coleccionar libros en las casas, tal como hoy la entendemos, era mucho más frecuente oír por boca de narradores los sucesos acaecidos.

Federico García Lorca decía que su vocación poética se la debía a los cuentos y canciones oídos a las mujeres de la vega granadina; Willian Faulkner siempre estuvo agradecido a las historias oídas de boca de las criadas negras del sur de EE.UU., Antonio Muñoz Molina, nos cuenta en su libro Pura alegría, (1998, pág. 55) " Y una de las imágenes más vívidas de mi niñez no procede de un recuerdo visual, sino de la voz profunda de mi abuelo materno contándome la historia de una mujer a la que enterraron viva en el cementerio de mi ciudad, y que cuando abrieron el ataúd tenía los ojos en blanco y los dedos rotos de arañar el terciopelo y la madera de la tapa." También nosotros podemos recordar como se cantaban los amores de Alfonso XII y María de las Mercedes, en los juegos de corro de las niñas de nuestra infancia.

Estas anécdotas nos hacen valorar la importancia de la palabra en la transmisión de nuestra cultura.

         La influencia de la palabra oída es muy fuerte, quizás todos recordemos nanas y canciones recitadas por nuestros mayores o esas historias de miedo que de niños nos contábamos unos a otros en nuestras horas de asueto. Por lo tanto, nada mejor para hacer lectores, que pescarlos  por el oído.

Si logramos interesar a nuestro auditorio con cuentos mágicos, el día en que no estemos para contárselos de nuevo, quizá tengan cerca un libro que recoja esas leyendas que tanto desean escuchar.

Se me viene a la memoria un recuerdo de la famosa  plaza de Marrakech, Jemaa el Fna, donde es frecuente encontrar corros de personas escuchando atentamente historias contadas por un narrador. Cierto día presencié durante unos minutos la gran atención con que el público seguía una historia, contada por un hombre menudo que sabía transmitir muy bien por medio de su cara, de sus manos, de todo su cuerpo, el contenido de una historia, que yo no entendí, pero que me gustó oír.

         A la hora de contar debemos sentir íntimamente el relato, saber contar lo esencial del tema, no es necesario aprender de memoria el texto,  hay que procurar no interrumpir la narración y sobre todo relatarlo de forma sencilla, lógica, dramáticamente y con entusiasmo.

         Estos mismos consejos se pueden aplicar a la lectura en voz alta. Si no queremos contar historias, podemos leerlas; el sólo hecho de que los alumnos nos vean leer, es ya una estrategia de animación a la lectura.

         La imagen, generadora de historias.

         Una imagen nos puede traer más de mil palabras. Una imagen puede ser la generadora de una historia. Al igual que una palabra, una imagen  puede recuperar muchos de nuestros recuerdos, unos asociados a otros, hasta completar un relato. Durante este proceso  nuestra mente se ve obligada a buscar otras imágenes y a asociarlas con palabras para que podamos comunicar lo que sentimos.

         Podemos ofrecer a nuestros alumnos una sola imagen, o un conjunto de ellas para que inventen un relato; pueden surgir tantos relatos diferentes como personas participen en la experiencia, aunque si el ilustrador nos ofrece unas ideas claras en sus dibujos, las historias pueden tener algunos aspectos en común.

         Otro recurso a utilizar es presentarles imágenes tridimensionales a través de libros desplegables u objetos, y a partir de ellos generar historias bien de forma individual o colectiva.

         También la imagen puede ser un complemento al texto, es decir lo ilustra y nos ayuda a comprender una historia, con lo cual asociamos la narración a unas imágenes predeterminadas, hecho que nos priva del placer de idear personajes y lugares, pero muy del gusto de los lectores más jóvenes.

         Otras veces las imágenes no son un añadido, sino que ellas conforman la historia. Los primeros libros  para formar lectores carecen de texto, están creados sólo con imágenes, lo que provoca el que cada lector las interprete de manera diferente, dando lugar a múltiples historias que potenciarán la imaginación infantil.

         Me decía Juan Madrid, en una conversación distendida que mantuvimos no hace mucho, que a él no le gustaba describir detalladamente a sus personajes, prefería dar unas pinceladas sobre ellos, para que sea cada lector o lectora el encargado de recrear esas imágenes y así hacerlos cómplices de la historia.

         ¿Cómo seleccionamos los libros?

         Cuando vayamos a recomendar un libro de lectura, lo primero y principal es que nosotros lo hayamos leído. A veces nos dejamos guiar por consejos de otros compañeros, por el representante de la editorial o por la lectura de la sinopsis del libro. Los tres procedimientos valen para conocer los libros y pueden que sean consejos acertadísimos, pero también es posible que ese libro en concreto no sea el adecuado para que lo lean nuestros alumnos, bien porque la temática tratada no sea de interés en nuestro entorno, o el momento no sea el adecuado.

         Cuando vayamos a recomendar un libro, fijémonos en su extensión, en su vocabulario, en las ilustraciones, en la complejidad de sus oraciones,... y sobre todo en los valores que pueda transmitir. Creo que es fundamental prestar atención a los temas transversales que encierra cada título, porque nos va a ayudar mucho en la formación de los ciudadanos y ciudadanas en el Humanismo del siglo XXI, en el sentido que nos indica Fernando Savater en su libro Despierta y lee (1998, pág. 72) " ... es imprescindible recuperar el aliento humanista, que lucha no sólo proteger las vidas sino por instituir las libertades, por educar en valores universales, por administrar los asuntos humanos de una manera no tribal, sino supranacional."

         El apartado de la edad no lo menciono, porque pienso que no deberían marcarse los libros por edades. Las editoriales lo hacen para facilitarnos el trabajo a profesores y a padres a la hora de elegir. Pero es muy difícil acertar, algunas veces una obra resulta complicada para los chicos a los que va destinada y en otras ocasiones sucede lo contrario. También puede ocurrir que dispongamos de un alumnado no capacitado para leer los libros marcados para su edad, pero que se niega a leer un libro recomendado para más pequeños.
        
Procuraremos seleccionar libros que cuenten una historia completa. No soy partidario de libros de lecturas compuestos por fragmentos de otros libros, salvo casos de buenas antologías, la mayoría de éstas dejan insatisfechos a los lectores.

         También debemos huir de los libros ilustrados con los personajes famosos de la última película de dibujos animados; la mayoría de ellos utilizan imágenes muy conocidas como anzuelo, que suelen ir acompañadas de un texto mal traducido, lo que crea dificultades de comprensión y por lo tanto, alejan a los lectores de la historia que hay detrás.

         ¿Se anima a escribir desde la lectura?

         Está claro que sí.  El simple hecho de leer está haciendo que nos fijemos en las palabras escritas, sin darnos cuenta ampliamos vocabulario, conocemos construcciones gramaticales nuevas, vemos maneras diferentes de dialogar, de contar un hecho,.... Una persona que lee se expresa oralmente y por escrito mejor que quien no lee nunca y puede sentir deseos de contar historias por escrito..

         Si antes de comenzar a leer un libro, jugamos a inventarnos su contenido a partir de su título estamos haciendo ejercicios de creación literaria y si le pedimos a los alumnos
 que reflejen sus opiniones por escrito, estamos animando a escribir. Luego, una vez leído, podemos analizar el final y decidir cambiarlo a nuestro gusto; si después lo anotamos en nuestro cuaderno, estamos animando a escribir.

         Por último, hay que decir que la lectura es un arma cargada de futuro, aunque muchos no se lo crean.





Bibliografía:



BETTELHEIM, Bruno y ZELAN, Karen. (1989): Aprender a leer. Barcelona. Crítica.

MUÑOZ MOLINA, Antonio. (1998): Pura alegría. Madrid. Alfaguara.

RODARI, Gianni. (1979): Gramática de la fantasía. Barcelona. Reforma de la escuela.

SARTO, M ª Montserrat. (1984): La animación a la lectura. Madrid. S.M.

SAVATER, Fernando. (1998): Despierta y lee. Barcelona. Alfaguara.








Este artículo se publicó en la revista CLIJ y se puede leer en el siguiente enlace. Febrero 2001.

http://prensahistorica.mcu.es/ca/consulta/registro.cmd?id=1007648