Una historia fantástica
Texto e ilustración:
Bruno Heitz
Editorial Kalandraka
ISBN: 978-84-1343-280-9
220 x 220 mm, 48 páginas
Tapa dura, 14 €
(+ 3 años) 2024.
Por José R. Cortés Criado.
“Era un granjero que tenía una camioneta que frenaba muy mal.” Bruno Heitz: Una historia fantástica.
Sin duda alguna, es una historia fantástica, aunque desde su
inicio se vislumbra la tragedia. Los protagonistas: un hombre que conduce su camioneta
que no frena muy bien; una vaca, que tiene sed y cruza sin mirar la carretera
para llegar al río y… un accidente. Vaca y camioneta rotas.
El señor es muy manitas y, viendo lo acaecido, saca sus
herramientas y recupera lo que puede de ambos elementos y surge una vaca-camioneta.
No anda rápido y da leche con sabor a gasolina. Decepcionado, el buen hombre
decide ir al campo para relajarse él y su camioneta-vaca.
Cuando llegan presencian algo horrible. Un lobo se come a
una cabra. La vaca actúa y espanta al raposo y el buen hombre vuelve a hacer
uso de sus herramientas y une lo que queda de la cabra y la vaca y surge la vacabra, que da una leche buenísima con la que hace quesos excelentes y gana dinero
para adquirir una camioneta nueva.
Está claro que todo es superfantástico y esa sucesión de trágicos
accidentes encadenan una serie de soluciones que mejoran la calidad de vida de todos
sus protagonistas. Los pequeños lectores disfrutarán e idearán nuevos
personajes mezclando elementos que le sean cercanos, a la par que inventará
palabras para definirlos.
Si original es el texto, mayor lo son las ilustraciones. Su
autor, Bruno Heitz, mezcla pinturas para crear fondos planos de vivos colores
sobre los que coloca elementos de madera pintados, dando tal volumen a cada página
que los lectores sentimos que sus elementos se salen.
Unidos a estas originales ilustraciones que ocupan el
espacio de forma singular están los breves textos y algunos elementos
onomatopéyicos propios del cómic que hacen de cada doble página una excelente
lectura textual y visual.
Otro cuento para soñar despierto que gustará a todo aquel
que se atreva a abrir sus páginas.
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