Este homenaje, lejos de
la descripción de una estampa marinera, es una serie de paralelismos que juegan
con el concepto de parejas, tríos, cuartetos… están inspirados en su poema
“Playa”, dedicado a Federico García Lorca y publicado en el libro Las islas invitadas. Comienza con su
primer verso: “Las barcas de dos en dos”.
Las
barcas de dos en dos,
los
pies de dos en dos
y las
parejas de dos en dos.
Los
cubiertos de tres en tres,
las
comidas de tres en tres
y los
tríos de tres en tres.
Los
caramelos de cuatro en cuatro,
los
abrazos de cuatro en cuatro
y los
cuartetos de cuatro en cuatro.
Los
mosquitos de cinco en cinco,
los
amigos de cinco en cinco
y los
quintetos de cinco en cinco.
Las
cerezas de seis en seis,
las
sorpresas de seis en seis
y los
sextetos de seis en seis.
Los
días de la semana de siete en siete,
los
regalos de siete en siete
y los
septetos de siete en siete.
Las
flores de ocho en ocho,
los
músicos de ocho en ocho
y los
octetos de ocho en ocho
Las
uvas de nueve en nueve,
los
sueños de nueve en nueve
y los
nonetos de nueve en nueve.
Los
dedos de diez en diez,
las
alegrías de diez en diez
y las
decenas de diez en diez.
Manuel Altolaguirre Bolín (Málaga, 1905 - Burgos, 1959) fue un poeta y editor español. Fundó las
revistas Ambos y Litoral, esta última aglutinó a la Generación del 27. Fue un fiel
defensor de la cultura tanto en España como en Cuba o en México donde vivió
exiliado. Su primera esposa fue Concha Méndez.
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