El
salvaje Uff…busca un hogar
Texto:
Michael Petrowitz
Ilustración:
Benedikt Beck
Traducción:
Marinella Terzi
Editorial Edebé
Editorial Edebé
Colección
El salvaje Uff
ISBN
978-84-683-4082-1
140 x
210 mm, 224 páginas
10,50 €,
(8 años) 2019.
Por José
R. Cortés Criado.
“Simon
es mi amigo. Y los amigos se ayudan, aunque ni les vaya ni les venga.
Así te sientes bien.” Michael Petrowitz: El salvaje Uff…busca
un hogar
Lio es
un jovencito que quiere quedar bien delante de sus amigos y no duda
en coger el
helicóptero de juguete sin permiso de sus padres y salir al campo a demostrar
sus habilidades aeronáuticas, pero cuando sus colegas lo animan realizar
una acrobacia mayor, el aparato cae en la mina.
La mina
es un lugar peligroso, es el campo de trabajo del Profesor Dr. Dr. Snaida,
está totalmente prohibido entrar en esa zona, todos temen por que sus
vidas corren peligro allí dentro, ese profesor anda en busca de una
criatura extraña
de hace 66 millones de años, un Uff.
Pues el
pequeño Lio, en su intento por recuperar su juguete cae, provocando un
pequeño derrumbamiento y aparece una criatura peluda de intenso
color azul que
enseguida congenia con él y se mete en su mochila huyendo del profesor,
es un Uff y cree que quiere comérselo.
Lio se
aterroriza ante las malas pulgas del señor, inventa su mejor excusa
y sale
corriendo del lugar; además Snaida ha recibido una carta en la que
le anuncian
la retirada de los fondos para su investigación si no muestra algún progreso
en su búsqueda.
Lio
corre a casa, tiene que tener mucho cuidado, porque lo pueden ver sus padres o
su hermana; además, su vecino y casero le tiene prohibido pisar su
césped y pasar
cerca de sus tulipanes, así que superando esos peligros lo introduce
en su
dormitorio, pensando en mostrárselo mañana a sus amigos, los que
huyeron de la
mina, para demostrar su valía y comienzan los problemas.
En el
dormitorio las cosas no van como quisiese Lio, llega a un acuerdo con
Uff tras comerse un plato y desarreglar algo el dormitorio; peor fue
al día siguiente cuando se comió los tulipanes del casero y en el
colegio se dedicó a pintar en las paredes del salón de actos a la
directora de forma poco decorosa, comerse los timbres de las
bicicletas de los alumnos y huir del profesor Snaida que anda tras su
pista, modificar los correos electrónicos de la directora a sus
padres...
La vida
se le complica a Lio. Uff se lo pasa en grande divirtiéndose de lo
lindo con los nuevos descubrimientos que realiza continuamente, los
nuevos sabores, nuevas cuevas donde habitar, nueva familia, hasta es
capaz de comunicarse telepáticamente y acceder a los modernos
aparatos electrónicos.
Menos
mal que su hermana Amelie congenia con Uff y es su aliada parea defenderlo
ante todos, sobre todo del siniestro profesor al que confunden con
una explosión en la cantera, hasta los padres de Lio aceptan al
visitante y lo dejan vivir con ellos, pues la vida se les ha vuelto
más interesante desde que conocieron a ese ser que haciendo uso de
sus conocimientos y los que adquiere sobre la marcha da muestras de
gran humor y suma ironía.
La
historia está contada con mucha gracia, se lee con suma facilidad y
los lectores se divierten ante las situaciones tan disparatadas a las
que el pobre niño ha de enfrentarse por culpa de su nuevo amigo, que
desconoce las normas sociales, las dobles intenciones de algunas
palabras y no sabe mentir ni interpretar ciertas actitudes que los
humanos vemos con normalidad. Su sinceridad es enorme y eso suele
acarrear algunos problemas en determinadas situaciones.
Seguro
que los pequeños lectores comprenden a tan especial personaje y se
divierten con sus actuaciones frente a las personas.
El texto
se complementa con unas muy expresivas ilustraciones en blanco y
negro de Benedikt Beck, que nos muestra un original Uff y unos chicos
despiertos y animosos como son Lio, Lotta y el resto de sus amigos.