Texto: Paco Gámez
Ilustraciones: Ximena Maier
Colección Sopa de Libros. Teatro.
130 x 200 mm, 120 páginas
ISBN 978-84-698-3352-0
(+ 8 años) 2017.
Por José R. Cortés Criado.
Estamos ante una obra de teatro infantil, la primera que
escribe para este tipo de público Paco Gámez a partir del dicho “se ahoga en un
vaso de agua”. Para ello recurre a una enorme inundación y coloca a la protagonista
en una tesitura, darse por derrotada o enfrentarse a las adversidades y sobreponerse
a los problemas.
Nana cuenta con la ayuda de otros personajes que le hacen
ver la parte buena de las cosas y saber aprovechar todas las posibilidades que
le ofrece la situación para sobreponerse a la catástrofe; incluso cuenta con el
apoyo de los seres queridos que ya no están con ella.
La protagonista es una niña que está en el tejado de su
casa porque la ciudad lleva varios días inundada, allí, sola, preocupada y algo
asustada no sabe qué hacer ya que el panorama no es muy alentador.
Por más que mira no ve más que agua, hasta que descubre a
un niño en un árbol, él se refugió allí, son compañeros de colegio, ella no lo conoce;
terminan entablando una amistad, incluso pasan un rato juntos hasta que un
helicóptero rescata al pequeño.
Vuelve a estar sola y habla con sus padres que están en la
vivienda, bajo el agua, los diálogos son geniales, ella habla con normalidad
pero sus padres responden, preguntan y reganaban con muchos glubs glubs.
También conoce a una tortuga con la que analiza lo semejantes
que somos todos a pesar de las apariencias, ambas descubren que tienen algo en
común.
Lo mismo le ocurre cuando habla con la señora mayor que
vive en su tejado y no quiere marcharse de allí, ni que la rescaten, quiere
seguir en su casa de siempre con sus muebles y sus comidas; a sus padres les
pasa lo mismo y ella duda si irse, aunque los mayores le aconsejan que se suba
al helicóptero.
De su lectura se aprende que hay que saber convivir con los
demás, que el aspecto físico de cada uno no lo hace diferente en la forma de pensar
o entender la vida, que siempre hay esperanzas para una vida mejor, que todos
tenemos nuestras manías que nos hacen ser como somos, ni mejor ni peor, y,
sobre todo, que somos más parecidos a nuestros semejantes de lo que creíamos de
antemano.
Interesante texto teatral, que ayudará a reflexionar a todos
y podrá ser representado por los pequeños lectores, para ello, Idoia Ruiz de
Lara, actriz, docente y directora de teatro ofrece unas sugerencias al final
del libro; todas ellas dirigidas a facilitar la puesta en escena de esta obra.
La obra es divertida, los diálogos están bien estructurados
y las acotaciones perfectamente marcadas en tinta roja, todo ello con la finalidad
de facilitar su puesta en escena, que como bien dice el autor, puede ser
representada con personajes reales o marionetas.
¡Arriba el telón! ¡Que el teatro nos lleve a vivir con
mayor intensidad la lectura!Esta obra fue distinguida con el Premio SGAE de Teatro Infantil 2016.
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