miércoles, 1 de abril de 2020

"El bosque prohibido" de Judith Rossell


El bosque prohibido

Texto e ilustración:

Judith Rossell

Traducción: Xesús Fraga

Editorial Edelvives

Colección Los misterios de Stella 
Montgomery

ISBN: 9788414022429

135 x 205 mm, 312 páginas

11, 30 €, (+ 8 años), 2019.

Por José R. Cortés Criado.

“- Pero somos hermanas. Somos idénticas.

 - Lo que en realidad sois es dos caras de la misma moneda.” Judith Rossell: El bosque prohibido.


La protagonista de esta historia es Stella Montgomery, y es una pobre niña, que vive algo desencantada, con sus tres tías, a cual más horrible. Su vida es triste, oscura, aburrida y desesperante, ya que las tres señoras le hacen la vida muy penosa.

Los consejos que recibe de un libro de lectura que le regalaron sus tías son horripilantes. Todos sus protagonistas, niños y niñas, fallecen o son atrapados por un monstruo o sufren dolores…por no hacer caso de los mayores. No hay ninguna historia con final feliz.

Menos mal que deciden deshacerse de ella y la mandan a una vieja casa donde viven dos primos suyos. Para las tías es una liberación, para la niña una puerta de libertad, aunque desconoce su destino y las personas con las que convivirá.

La pequeña llega, no sin sobresaltos, a una casa enorme, algo descuidada, que tiene un halo y una leyenda de misterio. No sale de su asombro y se teme lo peor; no encontró durante el viaje a ninguna persona agradable, todos la miran con recelo y la tratan de forma seca.

Es bien acogida por sus dos primos, él, de su edad; ella, más pequeña; la institutriz que los educa es seria pero amable; la señora que cuidad la entrada de la casa es seca y malhumorada, pero es bien acogida aunque todos los personajes son bastantes extraños.
Su primo anda inventado aparatos poco útiles e indagando dónde se va el calor de la calefacción, porque a pesar del consumo de carbón, la casa está fría; su prima no pronuncia palabra alguna, se comunica perfectamente con los animales, tiene un armiño y un albatros como mascotas y amigos.

La casa es un edificio vetusto, sin luz eléctrica, perteneció a un antepasado suyo con gustos extraños, gran viajero, enorme aventurero y amante de lo exótico. La casa tiene cuarenta y seis habitaciones, muchas de ellas desconcordias para los niños, así como otros espacios donde se almacenan semillas, botes de cristal con seres conservados en formol, animales disecados y muchas piezas de extrema rareza que su propietario fue almacenando a lo largo de los años. Además hay un monstruo que aparece algunas veces y hace desaparecer a quien se le acerca.

En ese espacio transcurre la vida de esta niña que busca sus orígenes en aquella casa; allí estuvo ella con su mamá y su hermana gemela siendo un bebé. De ellas no sabe nada, cuando preguntaba sus tías le decían que eso era de mala educación; en el pueblo nadie quiere hablar de esa mujer, ni de una niña casi transparente que aparece de vez en cuando, ni del búho que presencia casi todo lo que ocurre, ni del niño de luz que tiene la pastelera en su casa; en fin, una serie de elementos paranormales que pueden asustar a los niños, aunque Strideforth, su primo, dice que ni los fantasmas ni los monstruos existen.

A lo largo de las páginas el lector irá descubriendo los orígenes de la protagonista, su gran secreto, los misterios que encierra la casa, el monstruo que habita en una zona húmeda del bosque y por qué aparece en determinadas épocas.

Además vivirá momentos de angustia y desespero, se sentirá perseguido por el monstruo, observado por alguien que no se ve pero se presiente, sentirá el frío de la noche, la lluvia caer sobre su cuerpo, oirá los gritos de la noche y sentirá unas enormes ganas de seguir leyendo.

La novela está escrita de tal forma que se lee sin descanso. Judith Rossell sabe atrapar al lector en cada capítulo, y dejar la intriga abierta al final del mismo para que enseguida empieces a leer el siguiente.

Y es que sin darte cuenta sientes que has viajado a la Inglaterra victoriana, compartes supersticiones y miedos a lo desconocido de aquella época y sientes que algo poco agradable va a suceder en el reglón siguiente, que te inquieta.

Me ha gustado mucho la lectura de El bosque prohibido, sus más de trescientas páginas se hacen cortas.





No hay comentarios:

Publicar un comentario