Pupila
de águila
Alfredo
Gómez Cerdá
Editorial SM
Editorial SM
Colección
Gran Angular
ISBN
978-84-348-2764-6
192
páginas, (+ 13 años)
45ª
edición 2018.
Por
José R. Cortés Criado.
Martina es una joven deportista que estudia en Madrid, sufre un accidente y es intervenida. Estando en el hospital se entera del ingreso de un joven, Igor, que ha intentado suicidarse y se acuerda de su hermano Toni, que se lanzó por un terraplén con su coche.
Martina es una joven deportista que estudia en Madrid, sufre un accidente y es intervenida. Estando en el hospital se entera del ingreso de un joven, Igor, que ha intentado suicidarse y se acuerda de su hermano Toni, que se lanzó por un terraplén con su coche.
En
el hospital hace buenas migas con una enfermera, Clara, joven,
alegre, profesional... a la que le cambia la cara cuando se entera de
que Martina es hermana de Toni. Este es un desconocido para Martina,
su hermano era muy hermético, llevaba mucho tiempo fuera del pueblo,
y se alegró al saber que su hermana se iría a Madrid para estudiar.
Cuando
la joven llegó a la capital se encontró con la muerte de Toni, con
un piso puesto a su nombre y una colección de discos muy
interesante; entre todos los discos le llama la atención uno de la
cantante chilena Violeta Parra, en el que ha escrito “Pupila de
águila” palabras sacadas de una de las canciones. Para Martina lo
más importante es saber quién era su hermano.
Con
Igor queda en verse dos semanas después de tomar el alta
hospitalaria, se ven, ella siente algo por el chico, él parece
ausente, un poco extraño y ella teme que vuelva a cometer otra
tontería.
Poco
a poco van conociéndose y ambos deciden investigar sobre la vida de
Toni al saber que tuvo contacto con un personaje poco de fiar, Jorge
Barciela, que misteriosamente apareció muerto después de Toni;
también visitan una agencia donde conocen a una chica, Mónica, que
también conoció a Toni; y a Nino Roldán, personaje bastante
siniestro que ordena y manda sobre los demás y actúa con mucha
prepotencia.
Tras
muchos avatares, miedos, inseguridades, persecuciones, intento de
asesinato... saben que Toni trabajaba para Barciela y Roldán, que
ambos tenían una agencia como tapadera de negocio de pornografía y
tráfico de drogas. Cuando Toni supo que su hermana venía a vivir a
Madrid decidió cambiar su modo de vida y sus compinches no se lo
permitieron, por eso fue asesinado.
Entre
las intervenciones de todos los citados y de una joven, Lucía,
enamorada de Toni, que vive en un centro de rehabilitación de
toxicómanos, se aclara todo. Martina intenta sobreponerse a la
noticia cuando es secuestrada junto a Igor y gracias a que la policía
estaba al tanto de todo pudieron salvar la vida.
Paralelamente
a esta historia detectivesca, está la relación de los dos
protagonistas, que tiene sus altibajos y cuando parece que él
prefiere fumar porros y encerrarse en sí mismo, ella desea volver a
su pueblo a respirar aire puro porque no siente respuesta al amor que
siente por él.
Más
tarde Igor decidió ir a buscarla y con los datos que ella le dio se
dirigió a la estación de Chamartín y subió en el primer tren con
dirección a Santander. Solo debía bajarse en un pueblo ente montañas
que huela a galletas recién hechas, después ir a un pueblo minero
donde las casas están tiznadas y, por último, subir por una vereda
hasta el pueblo de Martina.
Alfredo
Gómez Cerdá escribió esta novela en 1987, dos años más tarde fue
publicada en el mes de junio, desde entonces, no ha dejado de
reeditase, en mayo de 2018 salió la cuadragésima quinta edición.
Solo
conocer este dato puede hacernos pensar en la valía de la obra. He
vuelto a leerla después de veintinueve años y sigue gustándome
seguir la trama bien ligada donde se entrecruzan distintas historias
a las que poco a poco se van añadiendo personajes que de alguna
manera se cruzaron en la vida de la joven protagonista con
anterioridad.
Nada
más comenzar el lector siente gran interés por la historia y se ve
envuelto en una trama donde nada parece encajar; una chica que busca
conocer a su hermano muerto, una vivienda donde no hay nada que
identifique a su dueño más que los discos, ya sean de música
popular o clásica y un joven que intenta ayudarla, aunque lo que
busca realmente es decirle que le gusta, pero siempre ocurre algo que
le impide declararse hasta que lo hace voz en grito, al amanecer, en
un pueblecito del norte de España.
Buena
historia, interesante trama, que seguirá gustando aunque esos
protagonistas no tengan cuenta en las redes sociales, ni teléfonos
móviles, ni acceso a internet; su tiempo es otro tiempo muy
distinto, en cuanto a las comunicaciones, al de hoy.
El
autor ha sabido hilvanar esta trama con agilidad y suspense
suficiente como para tener a los lectores pendiente de los avances de
la investigación de ambos jóvenes a lo largo de sus páginas.
El
tráfico de drogas y el amor se cruzan en sus paginas donde dos
jóvenes de caracteres muy distintos se atraen y se repelen hasta el
final, que comprende que tienen más cosas que les unen que las que
ellos consideran que les separan. El amor triunfa frente al mal.
Si quieres conocer otros libros de Alfredo Gómez Cerdá pincha aquí.
hay mucho fallos
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Eliminar