Los girasoles ciegos
Texto: Alberto Méndez
Ilustraciones: Gianluigi Toccafondo
240 x 190 mm, 256 páginas
Jóvenes-Adultos, 2017.
Por José R. Cortés Criado.
La editorial Edelvives ha publicado una magistral novela
con dos versiones, la primera la ya publicada en 2004 por la editorial Anagrama
y la segunda, la versión ilustrada de la misma que realiza Gianluigi
Toccafondo.
Alberto Méndez escribió esta obra para que la guerra civil
española no quedase en el olvido; no cuenta la guerra sino cuatro cuentos
breves que recuerdan la gravedad de una contienda entre hermanos, en los que
los vencedores nunca pueden ser considerados triunfadores y, en los que la
dignidad de los vencidos los dota de un aura de triunfo a pesar del dolor
recibido.
Los relatos están fechados y tiene su título y subtítulo
que enmarcan perfectamente el texto. Se trata de un ciclo de cuentos engarzados
por algunos personajes. El capitán desertor del ejército de Franco del primer relato
aparece en el tercer cuento compartiendo celda con el fabulador de historias
para vivir un día más; la joven amada del segundo relato es la hija del señor
oculto en un armario que acaba sus días arrojándose por una ventana en el
cuarto relato.
El primero lleva por título: 1939 Primera derrota o si el corazón pensara dejaría de vivir.
Narra cómo un capitán del ejército franquista se entrega a los soldados
republicanos momentos antes de que estos se rindan ante el ejército sublevado.
Nadie lo entiende, solo él sabe por qué quiere entregarse a un ejército
derrotado.
El segundo. 1940
Segunda derrota o el manuscrito encontrado en el olvido. Narra la muerte de
un joven poeta, su amada y el hijo de ambos de inanición, en medio del monte
cuando huían hacia Francia después de la derrota.
El tercero. 1941
Tercera derrota o el idioma de los muertos. Un miliciano republicano
condenado a muerte alarga su condena halagando los oídos de un coronel miembro
del tribunal que lo juzga y de su esposa; inventa buenos recuerdos del hijo de
ambos con la esperanza de seguir con vida, hasta que decide poner fin a tal
bellaquería y refiere lo desalmado y cruel que era el hijo del coronel. Así se
acabó la espera de la muerte.
El cuarto. 1942.
Cuarta derrota o los girasoles ciegos. Un intelectual republicano vive
oculto en un armario hasta que se delata para defender a su esposa que estaba
siendo violentada por un sacerdote del nacional catolicismo que ardía en deseos
carnales.
El valor de la obra de Alberto Méndez está muy reconocido,
su fuerza literaria, su valor como recordatorio de la atrocidad que fue la guerra
civil están más que remarcados, prueba de ello es que la novela comenzó
consiguiendo el Primer Premio Setenil, más tarde obtuvo el Premio de la Crítica
y el Premio Nacional de Narrativa
Méndez trabajó en el mundo editorial, escribió guiones de
cine con Pilar Miró hasta que con sesenta y tres años publicó su obra, que
póstumamente obtuvo reconocimiento internacional.
Gianluigi Toccafondo elige los títulos de los cuentos y
algunas frases representativas del texto para complementar las imágenes casi
todas ellas en blanco y negro, con tonos anaranjados, amarillos, verdes, azules
o rojos que complementan los tonos grises de las imágenes.
Esta mezcla de claroscuro le da mucha fuerza a cada una de
las láminas, ya sea por la expresión de los rostros, la siniestralidad de las
deportaciones de presos, la soledad de las calles de Madrid o la de los niños
en los colegios franquistas.
La maestría del pincel de Gianluigi Toccafondo, su sensibilidad y su fuerza engarzan muy bien con la voz poética y emocional de Alberto Méndez
Esta segunda parte del libro, presentada de forma original
con un tamaño un poco más ancho y con las esquinas romas es un buen broche a la
novela original a modo de novela gráfica.
También es muy buena la opción escogida por el ilustrador
para complementar los textos de la primera parte con imágenes de distinto
tamaño en blanco y negro como la España de entonces.
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